Un poco de su historia:
El profesor Joseph M. Juran, nacido el 24 de diciembre de 1904, en la cuidad de Bralia, ahora parte de Rumania.
En 1912 él y su familia se trasladaron a Estados Unidos y se instalaron en Minnesota.
Licenciado en derecho e ingeniero electrónico, graduado de la Universidad de Minnesota, inició su carrera técnica en la empresa Western Electric en Hawthorne Works, Chicago en el año de 1924, ascendió hasta ocupar los puestos de gerente de calidad.
Fue funcionario del gobierno antes de iniciarse en la carrera de consultor en 1950. En 1928 escribió su primer trabajo sobre calidad: un folleto de entrenamiento llamado “Métodos estadísticos aplicados a los problemas de manufactura”.
Enseñó la doctrina de la gestión de la calidad desde 1946. Hasta entonces estuvo como experto en varias empresas americanas, japonesas y europeas. Contribuyendo en un nivel muy importante a la revolución que se produjo en Japón sobre el plan de calidad después de la Segunda Guerra Mundial. Juran es considerado como uno de los gestores de la revolución de la calidad en Japón, donde desde 1954 dictó conferencias y asesoró a empresas. No obstante, Juran cree que los principales responsables de la revolución de la calidad en Japón han sido los propios gerentes de operaciones y los especialistas japoneses. En 1979, fundó el Instituto Juran, donde se dictan seminarios de capacitación y se publican trabajos sobre la materia.
En 1984 lo premia el emperador japonés Hiri Hito con la orden del tesoro sagrado. Finalmente, después de una serie de lecturas triunfantes en 1993 y 1994, el tour “The Last World”, él suspendió toda publicación reciente, para dedicarse a escribir proyectos y dedicar tiempo a sus obligaciones familiares.
Juran fungió como maestro y conferencista de la Universidad de Nueva York y en la Sociedad Americana de Administración (AMA). Asimismo, trabajó como consultor de negocios y organizaciones en 40 países.
En los últimos años de su carrera, figuraba entre sus clientes Texas Instruments, Du Pont, Monsanto y Xerox.
Se le considera impulsor del concepto COQ y autor de varias obras de las cuales las principales son Manual de Expertos en Calidad, Gestión de la calidad, Concepción y Análisis de la Calidad, Como Conseguir la Calidad, El Papel de la Alta Dirección, Juran y la Planificación para la Calidad y Juran y el Liderazgo para la Calidad..
En 1912 él y su familia se trasladaron a Estados Unidos y se instalaron en Minnesota.
Licenciado en derecho e ingeniero electrónico, graduado de la Universidad de Minnesota, inició su carrera técnica en la empresa Western Electric en Hawthorne Works, Chicago en el año de 1924, ascendió hasta ocupar los puestos de gerente de calidad.
Fue funcionario del gobierno antes de iniciarse en la carrera de consultor en 1950. En 1928 escribió su primer trabajo sobre calidad: un folleto de entrenamiento llamado “Métodos estadísticos aplicados a los problemas de manufactura”.
Enseñó la doctrina de la gestión de la calidad desde 1946. Hasta entonces estuvo como experto en varias empresas americanas, japonesas y europeas. Contribuyendo en un nivel muy importante a la revolución que se produjo en Japón sobre el plan de calidad después de la Segunda Guerra Mundial. Juran es considerado como uno de los gestores de la revolución de la calidad en Japón, donde desde 1954 dictó conferencias y asesoró a empresas. No obstante, Juran cree que los principales responsables de la revolución de la calidad en Japón han sido los propios gerentes de operaciones y los especialistas japoneses. En 1979, fundó el Instituto Juran, donde se dictan seminarios de capacitación y se publican trabajos sobre la materia.
En 1984 lo premia el emperador japonés Hiri Hito con la orden del tesoro sagrado. Finalmente, después de una serie de lecturas triunfantes en 1993 y 1994, el tour “The Last World”, él suspendió toda publicación reciente, para dedicarse a escribir proyectos y dedicar tiempo a sus obligaciones familiares.
Juran fungió como maestro y conferencista de la Universidad de Nueva York y en la Sociedad Americana de Administración (AMA). Asimismo, trabajó como consultor de negocios y organizaciones en 40 países.
En los últimos años de su carrera, figuraba entre sus clientes Texas Instruments, Du Pont, Monsanto y Xerox.
Se le considera impulsor del concepto COQ y autor de varias obras de las cuales las principales son Manual de Expertos en Calidad, Gestión de la calidad, Concepción y Análisis de la Calidad, Como Conseguir la Calidad, El Papel de la Alta Dirección, Juran y la Planificación para la Calidad y Juran y el Liderazgo para la Calidad..
El enfoque de Juran para el Mejoramiento de la Calidad
En la lista de prioridades de Juran, el mejoramiento de la calidad ocupa un primer lugar. En este sentido, ha elaborado una propuesta estructurada que expuso por primera vez en su libro Managerial Breakthrough (Idea revolucionaria de administración), en 1964.
Esta propuesta incluye una lista de responsabilidades no delegables para los altos ejecutivos:
1. Crear una conciencia de la necesidad y oportunidad para el mejoramiento.
2. Exigir el mejoramiento de la calidad; incorporarlo a la descripción de cada tarea o función.
3. Crear la infraestructura: instituir un consejo de la calidad; seleccionar proyectos para el mejoramiento; designar equipos; proveer facilitadores.
4. Proporcionar capacitación acerca de cómo mejorar la calidad.
5. Analizar los progresos en forma regular.
6. Expresar reconocimiento a los equipos ganadores.
7. Promocionar los resultados.
8. Estudiar el sistema de recompensas para acelerar el ritmo de mejoramiento.
9. Mantener el impulso ampliando los planes empresariales a fin de incluir las metas de mejoramiento de la calidad.
Los tres procesos se relacionan entre sí. Todo comienza con la planificación de la calidad.
El objeto de planificar la calidad es suministrar a las fuerzas operativas los medios para obtener productos que puedan satisfacer las necesidades de los clientes.
Esta propuesta incluye una lista de responsabilidades no delegables para los altos ejecutivos:
1. Crear una conciencia de la necesidad y oportunidad para el mejoramiento.
2. Exigir el mejoramiento de la calidad; incorporarlo a la descripción de cada tarea o función.
3. Crear la infraestructura: instituir un consejo de la calidad; seleccionar proyectos para el mejoramiento; designar equipos; proveer facilitadores.
4. Proporcionar capacitación acerca de cómo mejorar la calidad.
5. Analizar los progresos en forma regular.
6. Expresar reconocimiento a los equipos ganadores.
7. Promocionar los resultados.
8. Estudiar el sistema de recompensas para acelerar el ritmo de mejoramiento.
9. Mantener el impulso ampliando los planes empresariales a fin de incluir las metas de mejoramiento de la calidad.
Los tres procesos se relacionan entre sí. Todo comienza con la planificación de la calidad.
El objeto de planificar la calidad es suministrar a las fuerzas operativas los medios para obtener productos que puedan satisfacer las necesidades de los clientes.
Trilogía de Juran
Las recomendaciones de Juran se concentran en tres procesos de calidad principales, llamados la Trilogía de calidad: (1)planificación de la calidad, el proceso de preparación para cumplir los objetivos de calidad; (2) control de calidad, el proceso de satisfacer los objetivos de calidad durante las operaciones, y (3) mejora de la calidad, el proceso de alcanzar niveles de desempeño sin precedentes. En la época en la que propuso esta estructura, pocas empresas participaban en actividades importantes de planificación o mejora. Por tanto, Juran promovía un cambio cultural significativo en la forma de pensar de la administración.
La planificación de la calidad empieza al identificar a los clientes, tanto internos como externos; determinar sus necesidades; traducir las necesidades del cliente en especificaciones; desarrollar características de productos que respondan a esas necesidades, y elaborar los procesos capaces de producir el producto o prestar el servicio. Por tanto, al igual que Deming,
Juran quería que los empleados supieran quién utiliza sus productos, ya sea en el siguiente departamento o en otra organización. Así, se establecen metas de calidad orientadas a satisfacer las necesidades de clientes y proveedores por igual a un costo combinado mínimo.
Después, se debe diseñar el proceso mediante el cual se obtiene un producto a fin de satisfacer las necesidades de los clientes y cumplir con las metas de calidad bajo las condiciones actuales de operación. La planificación estratégica para la calidad (similar al proceso de planificación financiera de la empresa) determina las metas a corto y largo plazos, establece las prioridades, compara los resultados con los planes anteriores y combina los planes con otros objetivos estratégicos corporativos.
Como equivalente a la insistencia de Deming de identificar y reducir las fuentes de variación,
Juran afirmó que el control de calidad requiere determinar qué se va a controlar, establecer las unidades de medición para evaluar la información de manera objetiva, fijar las normas de desempeño, medir el desempeño real, interpretar la diferencia entre el desempeño real y las normas y emprender una acción en cuanto a la diferencia.
Sin embargo, a diferencia de Deming, Juran especificó un programa detallado para el mejoramiento de la calidad. En este tipo de programa se tiene que probar que la mejora es necesaria, identificar proyectos específicos de la mejora, organizar el apoyo para los proyectos, diagnosticar las causas, proporcionar remedios para las causas, probar que los remedios son eficaces en las condiciones operativas actuales y ofrecer el control con el fin de conservar las mejoras. El enfoque de Juran se refleja en las prácticas de gran variedad de organizaciones en la actualidad.
La planificación de la calidad empieza al identificar a los clientes, tanto internos como externos; determinar sus necesidades; traducir las necesidades del cliente en especificaciones; desarrollar características de productos que respondan a esas necesidades, y elaborar los procesos capaces de producir el producto o prestar el servicio. Por tanto, al igual que Deming,
Juran quería que los empleados supieran quién utiliza sus productos, ya sea en el siguiente departamento o en otra organización. Así, se establecen metas de calidad orientadas a satisfacer las necesidades de clientes y proveedores por igual a un costo combinado mínimo.
Después, se debe diseñar el proceso mediante el cual se obtiene un producto a fin de satisfacer las necesidades de los clientes y cumplir con las metas de calidad bajo las condiciones actuales de operación. La planificación estratégica para la calidad (similar al proceso de planificación financiera de la empresa) determina las metas a corto y largo plazos, establece las prioridades, compara los resultados con los planes anteriores y combina los planes con otros objetivos estratégicos corporativos.
Como equivalente a la insistencia de Deming de identificar y reducir las fuentes de variación,
Juran afirmó que el control de calidad requiere determinar qué se va a controlar, establecer las unidades de medición para evaluar la información de manera objetiva, fijar las normas de desempeño, medir el desempeño real, interpretar la diferencia entre el desempeño real y las normas y emprender una acción en cuanto a la diferencia.
Sin embargo, a diferencia de Deming, Juran especificó un programa detallado para el mejoramiento de la calidad. En este tipo de programa se tiene que probar que la mejora es necesaria, identificar proyectos específicos de la mejora, organizar el apoyo para los proyectos, diagnosticar las causas, proporcionar remedios para las causas, probar que los remedios son eficaces en las condiciones operativas actuales y ofrecer el control con el fin de conservar las mejoras. El enfoque de Juran se refleja en las prácticas de gran variedad de organizaciones en la actualidad.
Diagrama de la trilogía de Juran.
El diagrama de la trilogía del producto y las deficiencias del producto.
El diagrama esta relacionado con las deficiencias del producto. Por tanto la escala vertical exhibe unidades de medida tales como el coste de la mala calidad, el índice de errores, el porcentaje de errores, porcentaje de unidades defectuosas y el índice de llamadas solicitando el servicio. Sobre esta escala, la perfección se sitúa en cero. Lo que va a hacia arriba es malo.
El resultado de reducir las deficiencias del producto es que reduce el coste de la mala calidad, se cumplen mas promesas de entrega y se reduce la insatisfacción del cliente.
Juran identifica los componentes de la revolución de la calidad en Japón de la siguiente manera:
El diagrama esta relacionado con las deficiencias del producto. Por tanto la escala vertical exhibe unidades de medida tales como el coste de la mala calidad, el índice de errores, el porcentaje de errores, porcentaje de unidades defectuosas y el índice de llamadas solicitando el servicio. Sobre esta escala, la perfección se sitúa en cero. Lo que va a hacia arriba es malo.
El resultado de reducir las deficiencias del producto es que reduce el coste de la mala calidad, se cumplen mas promesas de entrega y se reduce la insatisfacción del cliente.
Juran identifica los componentes de la revolución de la calidad en Japón de la siguiente manera:
- Los directivos de más alto nivel se hicieron cargo de la administración para lograr calidad.
- Capacitaron a toda la jerarquía en los procesos de la gestión de calidad
- Intentaron mejorar la calidad a un ritmo revolucionario.
- Le dieron participación a la mano de obra.
- Agregaron metas de calidad en el plan empresarial.
Comentario:
La filosofía del doctor Juran es una filosofía que se me hace muy interesante ya que muchas veces se tiene la costumbre de verificar las fallas de un producto hasta que este se ha elaborado por completo, sin en cambio si detectamos el error desde que el producto comience el proceso de producción, sería un gran beneficio para la empresa porque dejas de trabajar con ese elemento fallido y puedes reprocesarlo en ese instante, antes de que inviertas más dinero en el, l lo que se convierte teóricamente en un ahorro para la empresa, ya que no lo podemos llamar como ahorro debido a que es una falla pero se ve reducido el costo de esa falla significativamente.
Bibliografìa:
-Administración y control de la calidad. Guans James R., William Lindsey M. Sexta edición. Thomson 2005.
-Calidad total y productividad. Gutiérrez Pulido Humberto Segunda edición. Mc Graw Hill México, 2005
-Gestión para la calidad total en la empresa moderna. Ruiz-Canela López José. Editorial: Alfaomega. México 2004.
-Calidad total y productividad. Gutiérrez Pulido Humberto Segunda edición. Mc Graw Hill México, 2005
-Gestión para la calidad total en la empresa moderna. Ruiz-Canela López José. Editorial: Alfaomega. México 2004.